Susana Gimenez, en Mar del Plata

"Durante el verano descanso, y eso no lo negocio con nadie"



Y una vez más, su figura brilló sobre un escenario de Mar del Plata. Aunque, en esta ocasión, no hubo plumas ni purpurina. En el salón Vélez Sársfield, del Sheraton Hotel & Resort, Susana Giménez fue distinguida el sábado 22 por el intendente marplatense, Daniel Katz, como “visitante ilustre de la ciudad”, durante la ceremonia de entrega de los premios Martín Fierro del Interior. Enfundada en un vestido negro, con transparencias, de Donna Karan, la diva cruzó radiante la alfombra. Los conductores de la ceremonia, Boy Olmi y Teté Coustarot —gran amiga de Susana—, la invitaron al escenario, donde recibió el reconocimiento de los marplatenses. “Amo Mar del Plata. Mis abuelos vivieron aquí y durante muchos años también vine a visitar a mi madre, y me enamoré de esta ciudad”, confesó. Sin embargo, en estos últimos días ese recuerdo lejano pareció tomar forma nuevamente, luego que Nito Artaza le ofreciera 10 millones de pesos para volver al teatro. Una suma tentadora, que tejió los rumores de su regreso a las tablas. “Le agradecí a Nito su oferta, pero tengo mucho trabajo. Durante el verano descanso, y eso no lo negocio con nadie. Si vuelvo, sería con una comedia o un drama, que es algo que nunca hice, no con una revista”, sentenció la diva, que llegó el mismo sábado, a las 18:00, en un vuelo privado. Antes de ser distinguida, Susana recibió en exclusiva a CARAS, en la suite Presidencial del piso 10, del Sheraton Hotel & Resort Mar del Plata, de 240 metros cuadrados y vista a un exclusivo campo de golf y al puerto de la ciudad. En el amplio living, la diva se relajó para disfrutar de una copa de vino tinto Montchenot cosecha 1996 —su favorito—, que acompañó con jamón de Parma y una ensalada Capresse. Radiante, Susana ensayó alguna notas en un reluciente piano de cola negro Wülitzer, de origen estadounidense. Después concentró su mirada sobre unos cuadros con imágenes de la Belle Époque, en Mar del Plata, de principio del siglo XX. “Es un honor ser distinguida aquí. La última vez que vine fue para festejar el cumpleaños de Mirtha Legrand, el verano pasado. Sin embargo, cada vez que piso esta ciudad me despierta recuerdos maravillosos”, confesó. Minutos después de las 12, salió por la puerta trasera de la suite y bajó directamente al lobby, para hacer su bajada triunfal por la escalinata que conduce al salón principal del Sheraton. La organización contó con producción integral de Alvarez Quenink y producción artística de Daniel Mañas —que luego de 15 años regresó desde Los Angeles, donde participó de la producción de los premios Oscar y Golden Globes—. Entre otras celebrities estuvieron Guillermo Andino con su mujer, Carolina Prat, Luisa Kuliok, Raúl Lavié y su mujer, Laura, Esther Goris, Darío Lopilato y Nicolás Scarpino.Luego de recibir su distinción, la estrella del espectáculo disfrutó de la interpretación de Lavié de “Honrar la vida”, en su homenaje. A su lado estaban Daniel Katz y el secretario de Turismo de la provincia de Buenos Aires, Miguel Angel Cuberos. Ante el acoso de la prensa y de sus admiradores, la diva aplaudió a su amigo y luego se refugió en su habitación. El regreso a Buenos Aires estaba previsto para esa misma noche, aunque, debido a las malas condiciones climáticas, tuvo que postergar el viaje de regreso para el domingo al mediodía. fuentehttp://www.caras.uol.com.ar/edicion_1342/nota_02.htm